Dicen que hoy es día de reflexión, por que mañana domingo hay que votar.
Yo no puedo dormir estoy emocionada, y mi cabeza esta llena de cosas que sucedieron ayer en la concentración en las setas, mi corazón esta lleno de esta experiencia.
Hacia mucho tiempo que las personas mayores como yo, veníamos observando a una juventud muy pasota, que en lo único que se les oía era en las grandes concentraciones de botellonas, a las que iban como corderos, y de vez en cuando por desgracia había algún altercado, a veces debido a tanto alcohol.
Pero ayer rejuvenecí de pronto treinta años, me vi y por que así lo deseaba envuelta en un gran acontecimiento, acompañada de mi hijo mayor, nos fuimos a la Plaza Mayor de Sevilla, que no hacia mucho la habían inaugurado, la cual todo el mundo la llama ya, Las setas, a reunirnos con los jóvenes y apoyarlos en sus reivindicaciones: yo cuando me decidí estaba muy bien informada por las redes sociales a las que pertenezco como twitter, facebook y blogs.
Mi sorpresa fue cuando descubrí que la primavera había llegado de nuevo a Sevilla en el mes de Mayo.
Tenían formado grupos para todo, una gran organización, desde la alimentación, cuestión jurídica, asambleas, redes sociales, enfermería, en fin esto no era cualquier cosa era un campamento muy bien organizado.
Donde las cosas se van disidiendo primero, por pequeños grupos de trabajo, luego en una gran asamblea: No soy una experta en esto pero creo que de un paso a otro va un abismo, vi gente responsable, comprometida, con ganas de luchar por la justicia y el bien común.
Tengo que decir, que estuvimos tres horas sin movernos nos tenían enganchados, hubo testimonios de gente mayores que habían pasado una transición como yo, y que estaban allí para colaborar, y apoyar en lo que pudieran, familias enteras con hijos pequeños, madres e hijas, padres e hijos juntos, y muchos jóvenes coreando gritos todo con mucha emoción.
La consigna es nada de violencia, solo justicia: he comprobado como fabrican hasta los ceniceros, para que alla una máxima limpieza y nadie tenga que quitarles nada, también ellos se siente orgullosos de la colaboración ciudadana de la zona centro, les han suministrado todo cuanto podían como electricidad, alimentos, lo tienen también organizado que he comprobado durante la asamblea general, que es cuando mas personas se concentran, ellos suministran agua a todo el que la necesita.
Creo que podría decir muchas cosas mas, pero solo digo que me siento orgullosa de estos jóvenes, a los que tantas veces les cae la losa de que son el futuro de nuestro país, y también de los mayores que están apoyando sus reivindicaciones, pero necesitan mas ayuda, hagamoslo, todo el que pueda que no tenga miedo, debemos pensar que el tiempo del miedo ya paso, y eso sí lo han demostrado nuestros políticos.
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